En San Valentín, toca regalar algo romántico

El concepto del romanticismo es muy distinto en hombres y en mujeres. A algunos hombres,  el romanticismo les puede parecer una tontería, una cursilada y una memez. Pero a muchas chicas, sin embargo, puede que un pequeño detalle les ilumine el rostro y les haga sentir que están en una nube.

Si eres chico y no tienes la suerte de tener esa sensibilidad, pero quieres que tu chica se sienta la más afortunada del mundo, aquí te dejo algunas ideas que te pueden venir bien. Puedes adaptar estas ideas a sus gustos, a sus colores favoritos o a su sensibilidad.

Una cena con velitas pero… con más detalles

Lo típico sería organizar una cena con velitas en casa con una botella de champán para brindar. Y podemos aprovechar esta idea como base, pero añadiéndole algunos detalles. Si no tienes costumbre de cocinar para ella, eso puede ser un punto a tu favor. Elige una receta sencilla si no tienes mucha maña, seguro que agradecerá que hayas hecho el esfuerzo de meterte en la cocina.

También podemos añadir otros detalles como flores en un jarrón o una tarjeta con un mensajito especial al lado del plato. Intenta buscar un ambiente tranquilo e intimista donde los dos podáis sentiros como en una burbuja donde nadie puede entrar. Tendrás que cuidar este detalle porque este va a ser uno de los puntos fuertes de la sorpresa.

Vuestra historia contada en un cuento

Otra de las opciones es algo más especial, pero requiere imaginación y alguna dote literaria. Se dice que cuando una persona siente amor por otra, las palabras suelen salir solas. Déjate llevar, y escribe una historia, vuestra historia. Puedes cambiar a los personajes, por ejemplo ella puede ser una flor, y escribe un cuento de cómo os conocisteis, situaciones que habéis vivido, momentos especiales que habéis compartido…

Una vez hayas escrito tu historia, primero a modo de prueba en sucio, puedes trasladarla a un bonito librito, imprimirlo en hojas de colores o con fondos especiales para que su presentación sea igual de bonita que lo que lleva escrito.

Como podéis ver, los regalos no tienen por qué ser materiales, algo hecho por uno mismo, a veces tiene mucho más valor para la otra persona que algo comprado. Lo perfecto es que si elegís la opción de contar vuestra historia de amor, se refleje en ella todo vuestro cariño y amor, aunque la literatura y las florituras no sean precisamente vuestro fuerte.