Ideas para los peques de la casa

Es una tarea difícil encontrar aquellos juguetes que quieren nuestros hijos por Navidad. Es verdad que en este caso, solemos tener pistas más que suficientes como para acertar de pleno y que asome una gran sonrisa en sus caras. El problema es que muchos de los regalos que piden, suelen gustar a muchos más y en algunos casos nos encontramos con que están agotados hace tiempo.

Cada Navidad, muchos padres se plantearán las siguientes preguntas: ¿Un juguete?, ¿Educativo?, ¿Cosas que les hagan falta?, ¿Hay que darles todo lo que piden?… a veces es muy complicado decidirse porque queremos que nuestros hijos sean felices pero no queremos malcriarlos demasiado. Para eso, ya están los abuelos.

Bajo mi punto de vista, los niños tiene que jugar y divertirse, pero si además de entretenerse aprenden algo es mucho mejor. No hace falta que sean juguetes en el que adquiera conocimientos puros como tal, pueden ser cosas que estimulen al niño por ejemplo a que sea creativo y aprenda a imaginarse cosas.

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Regalo

Juguetes con mucha magia

Hemos dicho que los juguetes hacen que los niños desarrollen actitudes. Muchos estarán en contra de los juegos individuales y preferirán aquellos que creen grupo de amigos. En estos últimos años, hemos visto pasar ante nosotros cientos de modelos de maquinitas y videojuegos de todos los estilos.  Algunos creerán que es el mejor regalo que le podían hacer a su primogénito, pero hay opiniones para todos los gustos.

Creo que hacer desarrollar la creatividad desde muy pequeños puede ayudar a que cuando sea adulto use esa creatividad para destacar como profesional o sea una persona que buscar recursos y buenos recursos,  ante situaciones de dificultad. Al fin y al cabo, desarrollar el cerebro algo absolutamente necesario si se quiere que la humanidad avance.

Regalos prácticos

Si los juegos educativos, las consolas o diversos objetos de entretenimiento no os convencen, podéis acudir a regalos prácticos. Con la crisis que estamos atravesando, creo sinceramente que puede ser una alternativa muy válida. Si nos resulta demasiado difícil regalar solamente este tipo de objetos, podemos elegir algún pequeño juguete que le haga mucha ilusión.

Quizás sea porque he estado acostumbrada a que en mi casa prácticamente todos los regalos hayan sido con alguna utilidad, creo que en este momento son los más adecuados. Es verdad que estos obsequios pueden resultar poco atractivos, pero… en los tiempos que corren, la necesidad es lo primero.

 

Toys´R´us

Toys “Я” Us es una cadena de tiendas de juguetes en Estados Unidos. La cadena también se distribuye por Europa, Asia, Oceanía, África y Canadá.

Sobre la empresa

Nace en 1948 en Washington cuando Charles Lazarus decide convertir el pequeño establecimiento de bicicletas de su padre en una gran tienda de juguetes. Con el fin de crear un punto de encuentro para los niños, reúne en el nuevo espacio una amplia gama de artículos y juegos infantiles. Desde entonces, la firma Toys “R” Us y su mascota, la jirafa Geoffrey, se han hecho muy famosos. 

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¡Qué difícil es regalarle algo a un niño!

Cuando se trata de darle una alegría al pequeño de la casa casi siempre tenemos un problema. Sobre todo si no es el pequeño de nuestra casa. Queremos que al chico le haga ilusión y, a la vez, le guste a los padres, por no decir que el chico puede convertirse en el ejecutor de nuestra buena relación con sus papis.

La ejecución tendrá lugar en cuanto desprecie el esfuerzo que hemos hecho por buscarle algo original, bonito y adecuado a su edad. Las palabras mágicas son: “No me utta”. Tres palabras pronunciadas con lengua de trapo que suelen provocar el sonrojo de los, hasta el momento, orgullosos papás, seguidas de palabras de disculpa, a la vez que instan al pequeño destructor de amistades a que dé las gracias.

regalos infantiles

De mal en peor

Pero el mal ya está hecho. En cuanto nos marchemos, sabemos que los padres retirarán el juguete de la vista del infante y que sólo lo sacarán cuando vayamos de visita. “Pero mira cómo lo cuida, si aún lo tiene nuevo… Es sujuguete favorito”, proclamarán los muy hipócritas y ya casi examigos.

Por su parte, los padres del monstruito comentarán, apenas sepan que no los oímos, el mal gusto que tenemos para los regalos y repasarán uno a uno todos los que les hayamos ofrecido a lo largo de tantos años de amistad: que éste de baratillo, que si aquél de una horterez supina…

Condenado mocoso… “No me utta”·

Prevengamos

Para evitar tan desagradable (vale: y muy exagerada) situación, al igual que con los adultos, hemos de conocer al pequeño, sólo que en este caso a través de las palabras de sus padres. Que escuchemos a los orgullosos y babeantes culpables de a criatura cuando hablen de ella, vamos.

Una vez que sabemos cómo es –sería ridículo regalarle un DVD con las aventuras de Heidi a un muchacho que no es capaz de estarse quieto ni cuando le dan el biberón-, pensemos también en cómo agradar a sus padres. En este aspecto, los juguetes de muchos colores, educativos y de apariencia rara suelen funcionar muy bien.

No queremos correr riesgos

Y vamos a terminar este artículo sin hacer una sola recomendación concreta. Porque cada niño tiene sus gustos, porque sus padres tendrán sus criterios sobre qué es bueno y qué no para el retoño y porque no soportaríamos que por nuestra culpa tuvieras que oír proveniente de una enfurruñada lengua de trapo: “No me utta”.